El primer ministro de Portugal, António Costa, y el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, han inaugurado este lunes en Portugal la Gigabatería de Tâmega, una gran obra de almacenamiento hidroeléctrico cuya construcción se ha prolongado durante casi ocho años y ha conllevado una inversión de más de 1.500 millones de euros. Al evento han asistido también el ministro de Medio Ambiente y Acción Climática de Portugal, Duarte Cordeiro, el secretario de Estado de Medio Ambiente y Energía, João Galamba, y los presidentes de las Cámaras Municipales de Ribeira de Pena, Vila Pouca de Aguilar, Boticas, Chaves, Montalegre y Cabeceiras de Basto. Cerca de doscientas personas entre proveedores, empleados, autoridades locales, nacionales y periodistas de España y Portugal han sido testigos de este acontecimiento, que supone un hito internacional en el ámbito de la tecnología, la obra civil y la inversión medioambiental. Con una capacidad de 1.158 MW, el sistema electroproductor del Tâmega es capaz de almacenar 40 millones de kWh, equivalente a la energía que consumen 11 millones de personas durante 24 horas en sus hogares, convirtiéndose en uno de los mayores sistemas de almacenamiento de energía de Europa. El complejo está conformado por tres centrales - Alto Tâmega, Daivões y Gouvães - y, gracias a su capacidad de bombeo, puede almacenar energía para ser utilizada cuando más se precise; un ciclo de eficiencia energética y de verdadera economía circular que incrementará en la potencia eléctrica total instalada en Portugal y evitará la emisión de 1,2 millones de toneladas de CO2 al año - sin cuantificar otros muchos millones más gracias a la energía renovable que podrá integrar en el sistema - favoreciendo la lucha contra el cambio climático. Esta gran obra de ingeniería, en la que han trabajado varios miles de personas, evitará la importación de más de 160.000 toneladas de petróleo al año, consolidándose como motor socioeconómico y de creación de empleo en la región.Asimismo, la construcción del complejo en esta área del norte de Portugal ha contado con un ambicioso plan de acciones sociales, culturales y medioambientales, que benefician a siete municipios, y al que se han destinado más de 50 millones de euros. Tal y como ha señalado Ignacio Galán, el desarrollo de este gran complejo ha sido posible gracias al entorno de estabilidad jurídica y buen diálogo logrado por el Gobierno de Portugal en los últimos años. Además, esta infraestructura evidencia que las dos grandes metas de la política energética de Europa, la independencia energética y la descarbonización, son perfectamente compatibles siempre y cuando se trabaje en la electrificación del sistema económico y productivo. Durante su intervención, Ignacio Galán también ha anunciado que la compañía podrá duplicar en los próximos años las inversiones realizadas en la Gigabatería, alcanzando los 3.000 millones de euros, que destinará a nuevos parques eólicos y plantas solares ya en desarrollo o construcción. Iberdrola continúa así su estrategia de crecimiento sostenible que le ha posicionado como la mayor eléctrica de Europa, después de invertir 140.000 millones de euros en los últimos 20 años y de apoyar con sus compras a más de 19.000 empresas a través de las que genera 400.000 puestos de trabajo. Solo en contribuciones fiscales, Iberdrola destina 8.000 millones de euros cada año en los más de 30 países donde estamos presentes.